
No faltan los coches Lamborghini en las calles de Moscú. Al igual que otros autos deportivos y de lujo de alta gama, los Lamborghini son una señal de la riqueza relativamente nueva del país y del consumo conspicuo que la acompaña.
Hasta hace poco, cualquiera que comprara un Lamborghini en Rusia se limitaba a explorar el mercado de vehículos usados o importar un automóvil nuevo de un país vecino, ya que el fabricante de automóviles italiano no tenía una sola tienda minorista en Rusia.
Los tiempos, como nos dijo una vez Bob Dylan, están cambiando. Convencido de que el mercado ruso llegó para quedarse, Lamborghini contrató a Burevestnik Group, un minorista de automóviles y yates de lujo con sede en Moscú, para convertirse en el primer concesionario oficial de Lamborghini.
Para conmemorar el nombramiento, el Grupo Burevestnik realizó un evento de lanzamiento en la Galería de Coleccionistas de Moscú, al que asistieron el CEO de Lamborghini, Stephan Winkelmann, los actuales propietarios de Lamborghini, celebridades rusas, estrellas del deporte y políticos.
La recepción incluyó una presentación del Lamborghini LP700-4 Aventador, seguida de un desfile de moda con selecciones de la línea de ropa y accesorios de Lamborghini.
El Grupo Burevestnik está construyendo una sala de exhibición en Moscú, pero ha establecido operaciones de ventas temporales en el Crocus City Mall. Cuando el concesionario esté completo, albergará las ventas, el servicio y las ventas minoristas de accesorios para la gama completa de productos Lamborghini bajo un mismo techo.

Padre, marido y un apasionado del motor y en especial de los coches de lujo y superdeportivos.
